Una guerra a gran escala entre Israel e Irán parece inminente después de que funcionarios estadounidenses confirmaran que la administración de Benjamin Netanyahu está “totalmente preparada” para iniciar un ataque.
En respuesta, un alto funcionario iraní declaró que Teherán ya había recibido un aviso sobre el posible ataque y está planeando una respuesta de represalia “más contundente y destructiva” que las acciones anteriores.
Según informes, Estados Unidos ya está tomando medidas para evacuar su embajada en Irak y reubicar al personal no esencial y a sus familiares de Bahréin y Kuwait. El New York Times informó que altos cargos del ejército y el gobierno iraníes están considerando qué hacer en caso de un ataque con misiles balísticos.
Varias fuentes han confirmado que funcionarios estadounidenses han sido informados de que Israel está listo para lanzar una operación militar contra Irán, potencialmente sin el habitual apoyo estadounidense en materia de inteligencia y asistencia logística, informa el Express.
A Estados Unidos le preocupa que un ataque de ese tipo impulse a Irán a atacar también activos estadounidenses en el vecino Irak.
Esta semana, el Organismo Internacional de Energía Atómica descubrió oficialmente que Irán no ha cumplido con sus obligaciones nucleares por primera vez en 20 años.
Se espera que este hallazgo aumente aún más las tensiones en la región y se anticipa que las Naciones Unidas impondrán sanciones adicionales a Teherán para finales de año.
El organismo de control nuclear expresó su grave preocupación, afirmando: “El aumento significativo de la producción y acumulación de uranio altamente enriquecido por parte de Irán, el único Estado no poseedor de armas nucleares que produce ese material nuclear, es motivo de grave preocupación”.
El presidente estadounidense Donald Trump había insinuado previamente que Israel o Estados Unidos podrían recurrir a ataques aéreos contra instalaciones nucleares iraníes si las negociaciones fracasaban.
En un momento sincero en el podcast Pod Force One, Trump reconoció su menguante confianza en la voluntad de Irán de frenar sus ambiciones nucleares, confesando: “No lo sé, no lo sé. Lo pensé, y cada vez estoy menos seguro”.
El ministro de Defensa iraní, Aziz Nasirzadeh, lanzó una dura advertencia a la prensa el miércoles, afirmando que, si las negociaciones nucleares con Estados Unidos fracasan, “Estados Unidos tendrá que abandonar la región porque todas sus bases militares están a nuestro alcance y, sin miramientos, las atacaremos en los países anfitriones”.
Estos acontecimientos preceden a una reunión prevista en Omán el domingo, donde el enviado especial Steve Witkoff se reunirá con el ministro de Asuntos Exteriores iraní, Abbas Araghchi, respecto de la postura de Irán sobre una reciente propuesta de acuerdo nuclear de Estados Unidos.
The Mirror