No hizo falta mucho tiempo para que un gran accidente se llevara por delante a varios de los principales contendientes de las 500 de Daytona del domingo, incluido el del mexicano Daniel Suárez.

Al entrar en la curva 3 en la vuelta 14 de la 200, Kyle Busch empujó la parte trasera de Christopher Bell, que luego golpeó la parte trasera de Aric Almirola.

Almirola perdió el control de su Ford N°10 y fue hacia la línea de coches que venían en la otra fila, lo que desencadenó un enorme choque en cadena.

Entre los que sufrieron grandes daños y quedaron fuera de la contienda por la victoria de la carrera están el ganador de la pole Alex Bowman, Almirola, Ryan Blaney, Daniel Suárez, David Ragan y Ryan Newman.

“Nos empujaron demasiado pronto. Es una carrera muy, muy larga”, dijo Almirola. “Hombre, estábamos en una buena posición, simplemente sentados ahí rodando entre los dos o tres primeros y (Bell) vino con un gran empuje y me golpeó muy fuerte en un mal lugar”.

“Me hizo girar hacia la derecha y destrozó nuestro coche y terminó nuestra Daytona 500 demasiado pronto”.

Ragan, cuya participación en las 500 es su única salida prevista de la temporada 2021, calificó la situación de “desafortunada”.

“Nunca he conocido a un piloto que haya dicho: ‘Oye, voy a comenzar esta carrera de 500 millas y simplemente ser súper agresivo’. Todos hablamos de dar y recibir y de llegar al final, pero parece que nadie lo hace una vez que sale”, dijo.

“Es frustrante que todo el mundo esté empujando y empujando y acabo de ver (a Bowman) ser doblado y cada vez que alguien choca entre los cinco o seis primeros destroza muchos coches”.

Para colmo de males para muchos de los pilotos, un rayo que cayó en la zona obligó a sacar bandera roja y a suspender la carrera durante un mínimo de 30 minutos antes de que algunos de los vehículos dañados llegaran al garaje.

Menos de 45 minutos desde que ondeó la bandera verde a las 3:06 p.m. ET, sólo se habían completado 15 vueltas en el evento de 200 vueltas y 17 coches se habían visto involucrados en un total de dos accidentes.

“Obviamente, teníamos un Camaro muy rápido. Los Chevrolet estaban trabajando bien juntos; con suerte un Chevy todavía termina en el Victory Lane”, dijo Bowman.

“Me quito el sombrero ante todos en Hendrick Motorsports; han construido unos coches de carreras realmente rápidos. Odio que las carreras de superspeedway funcionen así a veces, pero eso es parte del juego”.

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