Barack Obama ha anunciado la muerte del perro Bo de la familia y le rindió homenaje en una publicación en las redes sociales.

Michelle Obama, en una publicación separada, recordó con cariño su presencia en la Casa Blanca y el Air Force One.

“Hoy nuestra familia perdió a un verdadero amigo y fiel compañero”, escribió el expresidente.

“Durante más de una década, Bo fue una presencia constante y gentil en nuestras vidas, feliz de vernos en nuestros días buenos, nuestros días malos y todos los días intermedios”.

Bo, un perro de agua portugués macho, tenía casi trece años y pasó gran parte de su vida en la Casa Blanca como “Primer Perro”. Falleció después de una batalla contra el cáncer.

En publicaciones posteriores, Obama escribió: “Él toleraba todo el alboroto que venía de estar en la Casa Blanca, tenía un gran ladrido pero no mordía, le encantaba saltar a la piscina en el verano, era imperturbable con los niños, vivía de las sobras la mesa de la cena, y tenía un cabello fantástico”.

Añadió: “Era exactamente lo que necesitábamos y más de lo que esperábamos. Lo vamos a extrañar mucho”.

La noche en que fue elegido presidente número 44, Obama prometió a sus hijas Malia y Sasha que recibirían un cachorro cuando se mudaran a la mansión ejecutiva.

Hubo mucha especulación sobre qué raza de perro elegirían los Obama o si adoptarían de un refugio.

Según los informes, los hijos de Obama nombraron a Bo en honor al gato de sus primos y al padre de Michelle, conocido como Diddley, una referencia al músico de R&B Bo Diddley. Su nombre también eran las iniciales del expresidente.

Bo llegó a la Casa Blanca como un regalo del senador Ted Kennedy, que tenía un perro de la misma camada.