Por Julia Ainsley – NBC News

La Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU, por su sigla en inglés) informó este martes de que el Gobierno que preside Joe Biden ha permitido que unos 2,000 inmigrantes “particularmente vulnerables” ingresen a Estados Unidos mientras esperan su audiencia ante una corte migratoria, una excepción a la política actual que impide que la mayoría de las familias y adultos solos crucen la frontera con México.

Entre quienes pudieron ingresar se encuentran personas enfermas; familias con niños muy pequeños; e inmigrantes que han sido amenazados o agredidos mientras esperaban en México. Son identificados ante la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por su sigla en inglés) por organizaciones humanitarias internacionales, dijo la ACLU.

Este programa para migrantes vulnerables permitirá eventualmente que 250 personas ingresen cada día, según dijo la ACLU, una vez que se hagan la prueba de COVID-19 y den negativo.

Esas personas se sumarán a los niños no acompañados y algunas familias que ya fueron autorizadas para ingresar a Estados Unidos.

La admisión de migrantes vulnerables es el resultado de las negociaciones surgidas por una demanda entablada por la ACLU para impugnar el uso del Título 42, una medida implementada por el Gobierno de Donald Trump que congela el derecho al asilo con la finalidad de detener la propagación del coronavirus.

“Aunque se espera que estas concesiones salven vidas, no sustituyen la eliminación del Título 42 y la restauración total del proceso de asilo”, dijo Lee Gelernt, subdirector del Proyecto de Derechos de los Inmigrantes de la ACLU.

Otra concesión de la Administración Biden, según la ACLU, fue un acuerdo para suspender temporalmente la práctica de trasladar a los inmigrantes que cruzan a Estados Unidos por la región del Valle del Río Grande de Texas a ciudades como El Paso, Texas, o San Ysidro, California, para retornarlos a México desde esas ciudades.

[Niños migrantes pasan noches en autobuses aparcados antes de ser reunificados con sus familias, denuncian activistas]

Los “vuelos laterales”, como se les llamaba, permitieron que CBP distribuyera sus recursos para procesar a los inmigrantes fuera del Valle del Río Grande, el sector fronterizo más activo para el tráfico de inmigrantes. Si bien ahora están suspendidos, la ACLU dijo que el Gobierno podría reiniciar los vuelos en cualquier momento.

El Departamento de Seguridad Nacional y CBP no respondieron de inmediato a una solicitud de comentarios sobre esas políticas.