BOGOTÁ (AP) — Las autoridades sanitarias de Colombia advirtieron el miércoles estar entrando a un nuevo pico de contagios a causa de la propagación de la variante ómicron de COVID-19. Sin embargo, no anunciaron restricciones adicionales a su población.

La presencia de ómicron en el país sudamericano se confirmó el 20 de diciembre con tres casos de viajeros provenientes de España y Estados Unidos.

“Ómicron es de 5 a 10 veces más contagiosa (que la variante delta), sin embargo, parece haber evidencia sugerente de que tiene una menor severidad”, indicó el ministro de Salud, Fernando Ruiz, en una declaración difundida a la prensa.

En tal escenario, agregó el ministro, se prevé un crecimiento rápido de la demanda de servicios médicos, aunque un menor uso de las unidades de cuidados intensivos y fallecimientos en comparación con otros picos de contagio.

El martes se registraron 4.306 casos nuevos de COVID-19 a nivel nacional, la cifra más elevada desde agosto. El mayor aumento de contagio lo han registrado cuatro ciudades principales: Bogotá, Medellín, Cali y Barranquilla.

El cuarto pico de contagios en Colombia sucede en medio de la temporada navideña, en la que las autoridades sanitarias habían advertido un aumento del contagio dada la mayor circulación de personas y la asistencia a eventos en espacios abiertos y cerrados.

Como medida de prevención, el ministro recomendó a los colombianos vacunarse con la dosis de refuerzo contra el COVID-19 disponible para la población mayor de 18 años y que ha sido aplicada a más de tres millones de personas, de acuerdo con los datos públicos.

El 56% de la población colombiana -calculada en 50 millones de personas- cuenta con el esquema completo de vacunación: una dosis en el caso de Johnson & Johnson, y dos dosis para Pfizer, AstraZeneca, Sinovac y Moderna.

Desde el inicio de la pandemia se han reportado en Colombia 5,1 millones de casos de COVID-19 y 128.900 muertes.