Para junio de este año se prevé que los responsables de distintas agencias de inteligencia de los Estados Unidos brinden ante el Congreso un informe acerca de los fenómenos aéreos no identificados (UAP, por sus siglas en inglés) u ovnis. Antes de que eso suceda, el exresponsable de armas del portaaviones de la marina estadounidense, Sean Cahill, exjefe militar de EE.UU., explicó cuán avanzada era la tecnología que observó cuando estaba en funciones.

Antes de dejar la Casa Blanca, Donald Trump firmó un pedido por el cual el Pentágono deberá brindar toda la información que disponga acerca del fenómeno OVNI o UAP, como lo llaman para evitar ambigüedades. Conforme han transcurrido los primeros meses de la administración de Joe Biden, ese plazo se acerca y hay una creciente expectativa por la información que pueda conocerse.

Durante el gobierno de Barack Obama, Sean Cahill se desempeñó como máximo responsable de armas del portaaviones de la marina estadounidense USS Princeton. En una reciente entrevista con la cadena de noticias CNN explicó la magnitud de lo que fue testigo directo.

“En 2004 yo era el principal jefe de armas a bordo del USS Prince. La tecnología de la que fuimos testigos con el OVNI Tic-Tac es algo de lo que no hubiésemos sido capaces de defendernos en ese momento”, afirmó Cahill.

Ante el tenor de la declaración del entrevistado, el periodista Chris Cuomo quiso ir más allá y le pidió que se explayara acerca de los avances (o peligrosidad) de lo que había sido testigo y le pidió que lo tradujera en un lenguaje llano. Sin vacilar, Cahill puso en cifras lo que consideró acerca de los denominados ‘cinco observables’: “Es una tecnología que supera a nuestro arsenal actual en al menos entre 100 a 1,000 años”.

“En primer lugar, la aeronave no tenía superficies de control. No tenía ningún medio de propulsión detectable. Se movía a velocidades hipersónicas y precedía a los pilotos a su punto de encuentro de la patrulla aérea de combate (CAP, por sus siglas en inglés). Parecía como si supieran hacia dónde iban nuestros pilotos antes de tiempo. Nosotros no poseemos esas habilidades en la actualidad”, diferenció.

Junto a Cahill, el ex subsecretario adjunto de Defensa para Inteligencia, Christopher Mellon, explicó por qué deberían estar más preocupados por dichos avistamientos. “Hemos tenido recurrentes violaciones en nuestro espacio aéreo [por los Estados Unidos] por parte de vehículos no identificados. Esto no es algo nuevo y celebró que el Congreso esté empezando a reaccionar”, concluyó.

Agencias