Mientras millones de dosis de la vacuna de Moderna se distribuyen por Estados Unidos, el doctor Anthony Fauci, principal epidemiólogo del país, recibió esta mañana la primera inyección de dicha vacuna contra el coronavirus.

En un acto en el Centro Clínico de los Institutos Nacionales de Salud en Bethesda, Maryland, frente a trabajadores de la salud que están en la primera línea de batalla contra el COVID-19, el doctor Fauci levantó las mangas de su camisa y recibió la inyección sin hacer ningún gesto. Luego levantó sus pulgares para señalar que todo había salido bien.

“Siento extrema confianza en la seguridad y eficacia de esta vacuna y quiero alentar a todos quienes tengan la oportunidad de vacunarse, para que tengamos un velo de protección en este país y así acabar con esta pandemia”, dijo momentos antes de recibir la vacuna.

Fauci aseguró sentirse honrado de ser parte del proceso que llevó, en menos de un año, a la identificación del virus SARS-Cov-2 y a la elaboración de una vacuna.

“Esto, lo que estamos viendo ahora, es la culminación de años de investigación que han conducido a un fenómeno que realmente no tiene precedentes, y que va desde la comprensión de que estamos tratando con un nuevo patógeno, un virus que fue descrito en enero de este año, a menos de un año después, tener vacunas que están yendo a los brazos de tanta gente, incluyendo el mío”, dijo.

El secretario de Salud y Servicios Humanos, Alex Azar, quien también recibió la vacuna, dijo que “no es nada menos que un milagro” el tener una vacuna segura que ayudará a salvar millones de vidas y que permitirá “ver la luz al final de este túnel”.

“Quiero que el pueblo estadounidense sepa que tengo total y absoluta confianza en la integridad e independencia de los procesos realizados por la FDA para aprobar estas vacunas. Tengo completa confianza en la seguridad y eficacia de estas vacunas”, dijo Azar.

Este lunes, el presidente electo, Joe Biden, y la primera dama, Jill Biden, recibieron la primera dosis de la vacuna en el hospital ChristianaCare de Newark, Delaware. En dicho acto, el político dijo a los estadounidenses que deben estar preparados y vacunarse en cuanto las dosis estén disponibles.

El viernes pasado, el vicepresidente saliente, Mike Pence, y la segunda dama, Karen Pence, también fueron vacunados, en un acto cuyo objetivo fue construir confianza en la vacuna.

Los líderes de la Cámara de Representantes y el Senado, Nancy Pelosi y Mith McConnell, recibieron la vacuna la semana pasada. La congresista Alexandria Ocasio-Cortez transmitió en redes sociales su experiencia recibiendo la inyección.

Políticos republicanos como el senador por Florida, Marco Rubio, y la senadora Linsey Graham, causaron controversia al recibir la vacuna pese a que violaron los protocolos de prevención al rehusarse usar mascarillas o tomarse una prueba de coronavirus antes de un debate.

De acuerdo con Politico, la vacuna se estará distribuyendo entre miembros esenciales de la política estadounidense para asegurar “la continuidad del Gobierno”.

Los llamados de los políticos a confiar en las vacunas se hacen entre la creciente desconfianza del público estadounidense y el aumento de la desinformación sobre el tema. Para que las tasas de transmisión de la enfermedad disminuyan, entre 60 y 70% de la población del país debe estar vacunada o tener anticuerpos contra el COVID-19.

En septiembre, el 49% de los adultos estadounidenses dijo que definitiva o probablemente no estarían dispuestos a vacunarse, de acuerdo con estimaciones del Pew Research Center. Una encuesta de la agencia The Associated Press, realizada la primera semana de diciembre, halló que solo la mitad de los adultos estadounidenses estaría dispuesto a vacunarse.

Con información de Politico.