Jan. 27—El estado de la Florida recibirá la semana que viene 307,000 primeras dosis de la vacuna contra el COVID-19, anunció el gobernador Ron DeSantis el martes en la noche a través de un tuit. Esto representa un incremento del 18% comparado con el monto que había recibido el estado durante las semanas anteriores— 260,000 según DeSantis.

“Mientras le damos la bienvenida a este modesto aumento, el suministro sigue siendo un problema crítico para vacunar a la población de 65 años o más”, dijo el gobernador republicano en la declaración.

El anuncio de DeSantis el martes en la noche fue el resultado de una llamada telefónica que tuvieron los gobernadores con la mesa de trabajo de la nueva administración ante al COVID-19. Jeff Zients, el coordinador del equipo de la Casa Blanca dijo durante una rueda de prensa el martes que se habían reunido con los gobernadores y algunos senadores para “actualizarlos” sobre el plan de vacunación.

El lunes, la Casa Blanca criticó que Florida solo había usado la mitad de las vacunas que le había mandado el gobierno federal. El martes en la mañana, DeSantis dijo que estaban reservando vacunas para segundas dosis, algo que había dicho previamente que no haría.

El grupo de trabajo de la administración del Presidente tiene planeado mandar, como mínimo 10 millones de dosis a los estados dentro de las próximas tres semanas, anunció la Casa Blanca el martes. Actualmente se estaban mandando unas 8.6 millones, lo que representa un aumento del 16%.

Aunque DeSantis solo mencionó las cifras de la semana que viene, ese aumento se espera que continué por las próximas tres semanas. Además, los gobernadores recibirán una proyección de cuantas dosis recibirán en tres semana para que puedan planear la vacunación.

Ni la oficina del gobernador ni el Departamento de Salud de la Florida respondió solicitudes de el Nuevo Herald.

El miércoles el Gobernador reclamó que el aumento no era suficiente para vacunar a las personas mayores del estado.

“Eso no va a ser una diferencia grande,”, dijo DeSantis. “Pero si nos ayuda”.

El plan de la administración del Presidente Joe Biden es proveer suficientes dosis a los estados para tener a unas 300 millones de personas vacunadas para el final del verano.

El primer objetivo del plan de Biden es vacunar a por lo menos 100 millones de personas durante sus primeros 100 días. Durante la última semana se vacunaron en promedio unas 1.6 millones de personas al día, dijo Rochelle Walensky, la directora de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC).

Andy Slavitt, el asesor principal del Equipo de Respuesta ante el COVID-19 de la Casa Blanca, dijo que para lograr estas metas tienen que proveer más vacunas a los estados y también aumentar el número de personas que puede inocular a pacientes así como los sitios de vacunación.

Dijo que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) va a enmendar el Public Readiness and Emergency Preparedness Act (PREP) para permitir que los doctores y enfermeras retiradas puedan inocular a las personas.

Pero DeSantis ha dicho que no está interesado en sitios federales en Florida, llamándolos “campamentos de FEMA”. El miércoles dijo que con más vacunas podrán aumentar el número de personas que se vacunan diariamente en los sitios estatales que ya existen como el Hard Rock Stadium.

Según las cifras más recientes del estado, en Florida se han vacunado 1,697,849 millones de personas. Casi 204,000 de ellas han recibido la segunda dosis de la vacuna. Ambas vacunas disponibles en Florida requieren dos dosis.

El cargamento con las 307,000 dosis de vacunas llegarán entre el lunes y el miércoles que viene, según el gobernador. No estaba claro cómo se distribuirían esas dosis.

Rachel Johnson, la directora de comunicaciones de la alcaldesa de Miami-Dade dijo que el condado recibirá la semana que viene la misma cantidad de vacunas que recibió esta semana— 2,900— para los sitios que son manejados directamente por el condado como el Tropical Park y Zoo Miami.

El condado Miami-Dade ha sido el peor afectado por la pandemia. Más de 360,000 personas han dado positivo en el condado y 4,768 residentes han muerto por complicaciones relacionadas con la enfermedad.

La reportera del Miami Herald Samantha Gross contribuyó información.