Un grupo de paleontólogos argentinos dio a conocer este martes (21.05.2024) el hallazgo en la provincia patagónica de Chubut de un dinosaurio carnívoro que vivió en el actual territorio del país suramericano hace 69 millones de años.

El dinosaurio, de la familia de los abelisáuridos, ha sido bautizado como Koleken inakayali y está relacionado con los Carnotaurus, uno de los carnívoros más característicos del período Cretácico superior (hace entre 71 y 69 millones de años), que también habitó en la actual América del Sur.

La investigación por la que se han hallado los restos del dinosaurio forma parte del proyecto ‘El Fin de la Era de los Dinosaurios en Patagonia’, en el que colaboran National Geographic Society y setenta investigadores del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina (Conicet).

Según los investigadores, Koleken inakayali es “más pequeño” que los Carnotaurus y no tiene cuernos en el cráneo.

Dinosaurio con “brazos ridículos”
“Los abelisáuridos se encuentran entre los carnívoros más notables y fascinantes del Cretácico, con una variabilidad única en la ornamentación del cráneo, como crestas, cúpulas y cuernos”, afirmó a National Geographic uno de los investigadores encargados del proyecto, Diego Pol.

De acuerdo con el medio, los carnívoros prehistóricos abelisáuridos tenían una constitución más robusta que los tiranosaurios más conocidos.

Federico Agnolin, paleontólogo del museo argentino, aunque no participó en la reciente investigación, señala que, en vida, los brazos de estos dinosaurios eran tan cortos que apenas se distinguían del resto de su cuerpo.

“Los abelisáuridos también tenían brazos ridículos, incluso comparados con los tiranosaurios. Los abelisáuridos tenían enormes huesos en los hombros, pero brazos extremadamente cortos con múltiples dedos pequeños, claramente inútiles para capturar presas y, sin embargo, bastante flexibles. Aún no sabemos para qué utilizaban sus extremidades anteriores”, afirmó Pol.

Dinosaurio Koleken inakayali: “Que proviene de las arcillas y el agua”
De acuerdo con Pol, el nombre del dinosaurio proviene del idioma tehuelche, un pueblo originario de la Patagonia, y significa “que proviene de las arcillas y el agua”.

“Esto hace referencia a que los sedimentos en los que se encuentran los restos fósiles eran arcillas depositadas en un estuario hace 69 millones de años”, añadió.

Por su parte, la palabra ‘Inakayali’ homenajea a un cacique del mismo pueblo.

Los paleontólogos encontraron un esqueleto parcial del dinosaurio, con varios fósiles craneales, restos de su cadera, su cola y sus patas.

“Seguramente el cuerpo de este animal fue transportado por un río hasta un estuario, donde fue sepultado poco tiempo después de su muerte”, detallaron los investigadores en un comunicado.

Para los expertos, el descubrimiento es una muestra de la variedad de los carnívoros abelisáuridos en el supercontinente de Gondwana, al que pertenecían geológicamente América del Sur, África, India, Madagascar, Australia y la Antártida.

“Es interesante porque nos llevará en el futuro a explorar qué pudo haber influenciado esos aumentos tan marcados en la evolución de estos carnívoros”, dijeron los expertos.

FEW (EFE, Conicet, National Geographic)