El primer ministro de Israel reconoció el martes que su sistema de defensa Cúpula de Hierro es demasiado oneroso y que el país está acelerando el despliegue de tecnología láser para ayudar a protegerse de los ataques con cohetes.

En una conferencia sobre seguridad, Naftali Bennett dijo que la nueva generación de tecnología _un “muro láser”— se presentará dentro de un año en el sur de Israel.

Poco se sabe de la eficacia del sistema, pero se espera que con el tiempo se despliegue en tierra, aire y mar, y envíe un mensaje disuasorio a su rival Irán y aliados de éste.

“Si podemos interceptar un misil o un cohete con un pulso eléctrico que cuesta unos cuantos dólares, en esencia neutralizaremos el anillo de fuego que ha montado Irán en nuestras fronteras”, dijo Bennett al Instituto de Estudios de Seguridad Nacional de la Universidad de Tel Aviv. “Esta defensa aérea de última generación también puede servir a nuestros amigos de la región”.

Hace una década, Israel presentó la Cúpula de Hierro, y los militares dicen que es un gran éxito, con una tasa de intercepción del 90% contra los disparos de cohetes recibidos durante cuatro guerras contra los militantes de la Franja de Gaza.

Pero en su discurso, Bennett dijo que el sistema está limitado por su alto costo, el cual es parcialmente cubierto por Estados Unidos Los funcionarios de Defensa habían previsto originalmente que la tecnología láser estuviera lista en unos dos años.

La tecnología láser pretende complementar a la Cúpula de Hierro y a otros sistemas para hacer frente a nuevas amenazas.

Bennett dijo que alguien en Gaza puede disparar un cohete hacia Israel por unos pocos cientos de dólares, pero interceptarlo cuesta decenas de miles de dólares.