Con el fin de encontrar pistas sobre el origen del planeta y rastros de posible vida, unos científicos de la agencia espacial japonesa anunciaron el jueves (19.08.2021) que planean traer a la Tierra muestras de una luna marciana en 2029, al menos un año antes de que lo hagan Estados Unidos y China, que ya iniciaron sus misiones en Marte.

La Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón (JAXA) pretende en 2024 enviar al espacio a un explorador para que aterrice en Fobos, la luna más grande que orbita alrededor de Marte, con el objetivo de extraer una muestra de 10 gramos del suelo lunar y traerlo de regreso a la Tierra en 2029.

De conseguirlo, Japón se le adelantaría a China y a Estados Unidos en la carrera por traer muestras de la región marciana, a pesar de empezar al menos cuatro años más tarde, según Yasuhiro Kawakatsu, director del proyecto.

El róver Perseverance de la NASA, ya situado en un cráter de Marte, recogerá 31 muestras que regresarán a la Tierra con la ayuda de la Agencia Espacial Europea en 2031. Asimismo, en mayo de este año, China se convirtió en el segundo país en aterrizar en Marte y quiere traer muestras para el 2030.

¿Por qué ir a Fobos y no a Marte directamente?
Los científicos de JAXA creen que alrededor del 0,1% del suelo de la superficie de Fobos procede de Marte, y 10 gramos podrían contener unos 30 gránulos, dependiendo de la consistencia del suelo, explicó Kawakatsu.

En tanto, Tomohiro Usui, profesor del Instituto de Ciencias Espaciales y Astronáuticas, afirmó que es probable que el suelo de Fobos sea una mezcla de material de la propia luna y de Marte esparcido por tormentas de arena.

El experto considera que, en vez de recolectar en un solo lugar del planeta rojo, al recoger muestras en varios lugares de Fobos existiría una mayor posibilidad de encontrar rastros de vida de Marte. Por lo demás, cualquier forma de vida que pudiera venir de Marte habrá muerto a causa de la dura radiación solar y cósmica en Fobos, aclararon los científicos de la JAXA.

Las muestras entre las agencias pueden complementarse
El científico dijo que la investigación japonesa sobre Fobos y las muestras de la NASA del cráter marciano pueden complementarse y podrían ayudar a dilucidar cómo es que la vida marciana -si es que la hubo- surgió y evolucionó en tiempo y lugar.

En diciembre de 2020, una sonda de la JAXA, Hayabusa 2, trajo más de 5 gramos de suelo del asteroide Ryugu, a más de 300 millones de kilómetros de la Tierra. Se trató del primer retorno con éxito de una muestra de asteroide al planeta.

JU (ap, nhk.or.jp, forbes.com)