Saltan chispas en Moscú tras el anuncio del envío de sofisticados sistemas de cohetes a Ucrania. Horas después de que el presidente Joe Biden anunciara que entregaría una pequeña cantidad de Himars, misiles de precisión de mayor alcance, al Ejército ucraniano; bajo la promesa de que no los utilizarían para atacar suelo ruso. El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, criticó duramente la medida. Rusia ya controla más de la mitad de Severodonetsk. El avance ha disipado las dudas en Occidente sobre el suministro de armamento sofisticado a Ucrania. Estados Unidos, Alemania, Grecia, República Checa, entre otros, han anunciado nuevos envíos.