El conflicto bélico en Ucrania iniciado el pasado 24 de febrero está pasando factura a Rusia. Las diferentes sanciones aplicadas por Occidente, han mermado el potencial de la economía del país, así como al patrimonio de los oligarcas más poderosos.

Desde que Estados Unidos anunciase el primer paquete de sanciones, hasta las últimas medidas anunciadas por la Unión Europea, Rusia ha visto cómo ha sido expulsada del sistema financiero SWIFT, el éxodo masivo de multinacionales, la congelación de los activos financieros de las principales entidades bancarias, así como la devaluación de la moneda oficial del páis, el rublo. Además, no son las únicas consecuencias que ha tenido su invasión en el país vecino.

Por otra parte, tanto Washington como Bruselas anunciaron vetos a las importaciones de diferentes materias primas. La Casa Blanca informó el pasado mes de marzo sobre la prohibición de las importaciones de gas y petróleo ruso, mientras que la UE apostó por el veto a otras materias primas como el carbón, la madera, los licores, marisco y cemento, además de prohibir las transacciones financieras con las entidades financieras rusas.

Además, el resto de países europeos también han buscado alternativas para garantizar el suministro de gas, aislando aún más a Rusia. Ante este escenario, Rusia observa cómo las reservas se agotan, lo que provocará una crisis económica en los próximos meses. Así lo confirmó la presidenta del Banco Central de Rusia, Elvira Nabiúllina, en declaraciones ante la Duma Estatal, la cámara baja de la Asamblea Federal de Rusia.

“El período en el que la economía del país ha podido vivir de las reservas se ha terminado. En el segundo trimestre, entraremos en un periodo de transformación estructural” avisó Nabiúllina que también mencionó los sectores que se verán más afectados. “Estarán asociados a las restricciones a las importaciones y, en el futuro, a las exportaciones de productos rusos”. De este modo, las limitaciones para realizar exportaciones e importaciones tendrán un impacto real.

“La política contra Rusia ha fracasado”
Unas declaraciones que contrastan con la versión ofrecida por el presidente ruso, Vladimir Putin, al asegurar que la estrategia económica de Occidente no ha surtido efecto. “Occidente intentó romper rápidamente la economía y provocar el pánico en las bolsas, y colapsar el sistema financiero. Podemos decir que la política contra Rusia ha fracasado”.

Como respuesta a todas las sanciones, el Kremlin elaboró un listado con países considerados “hostiles”, a los que obligó a pagar el gas ruso con rublos, la moneda del país. Además, era una medida de Rusia que obligaba a los países de la UE a realizar la apertura de cuentas bancarias en Gazprombank, la única entidad autorizada por el Gobierno de Putin. Entre todos esos países, están incluidos los 27 de la UE.

AS