PEKÍN/FRÁNCFORT/SAN FRANCISCO, 7 dic (Reuters) – La escasez de microprocesadores utilizados en la fabricación de automóviles podría interrumpir la producción de automóviles en China bien entrado el año próximo, según dijeron fuentes del sector, y las empresas de microprocesadores señalaron que están subiendo los precios y ampliando su producción en respuesta a esta situación.

Los automóviles se han vuelto cada vez más dependientes de los chips —muchos de ellos fabricados en Europa— para todo tipo de funciones, desde la gestión informática de los motores para un mejor ahorro de combustible hasta las características de asistencia al conductor, como el frenado de emergencia.

La producción de automóviles se redujo a principios de 2020 debido a los duros confinamientos causados por la pandemia de COVID-19, pero ha vuelto con fuerza, especialmente en China, ya que los consumidores prefieren viajar en vehículos privados en lugar de utilizar el transporte público.

Los proveedores de automóviles alemanes Continental, Bosch y Volkswagen, el mayor fabricante de automóviles del mundo, advirtieron sobre la escasez de componentes de semiconductores.

“Aunque los fabricantes de semiconductores ya han respondido a la demanda inesperada con ampliaciones de capacidad, los volúmenes adicionales requeridos solo estarán disponibles dentro de entre seis y nueve meses”, dijo Continental el viernes.

“Por lo tanto, los posibles cuellos de botella en la entrega pueden durar hasta el 2021”.

(información adicional de Yilei Sun y Brenda Goh in China; Jan Schwartz, Joern Poltz y Douglas Busvine en Germany; y Stephen Nellis en San Francisco; escrito por Edward Taylor; editado por Keith Weir and Jane Merriman; traducido por Tomás Cobos)