Aeropuertos y aerolíneas esperan sus mayores multitudes desde el comienzo de la crisis del COVID-19 la próxima semana para el Día de Acción de Gracias, incluso cuando un aumento de los casos de coronavirus golpea al país y las advertencias del gobierno se enfrentan a las usualmente activas vacaciones de viaje.

Durante la semana pico del Día de Acción de Gracias (Thanksgiving), American Airlines está agregando unos 500 vuelos al día, Southwest está agregando 300 vuelos más y United Airlines está poniendo unos mil 400 vuelos más en su programa.

El Aeropuerto Internacional de Dallas Forth-Worth, donde el tráfico sigue un 45 por ciento deprimido en comparación con el año pasado, espera que 1.3 millones de pasajeros pasen por el aeropuerto durante la semana de gran actividad. El mucho más pequeño Dallas Love Field espera de 13 mil a 15 mil pasajeros al día, aunque el vocero del aeropuerto Chris Perry declaró que Southwest Airlines, con sede en Dallas, ha estado dirigiendo más tráfico a través de Love Field.

“Vamos a tener un exceso de personal para asegurarnos de no tener grandes filas durante el Día de Acción de Gracias y las fiestas”, dijo Amy Williams, directora de seguridad federal de la Administración de Seguridad del Transporte (TSA, por su sigla en inglés) en Dallas Love Field. “Y de esa manera, podemos decirle a cualquier empleado que no se sienta bien que se quede en casa”.

Incluso la crisis de COVID-19, la mayor emergencia de salud pública en este país en un siglo, no es suficiente para impedir que la gente vuele en esta temporada de fiestas para reunirse con familiares y amigos, aunque tendrán que hacerlo en circunstancias extrañas y cautelosas. Los aeropuertos de North Texas están ahora equipados con barreras acrílicas, marcadores de distanciamiento social y reglas de uso obligatorio de cubrebocas.

Pero serán unas vacaciones de viaje sustancialmente reducidas. Los horarios de las aerolíneas han bajado entre el 40 y el 45 por ciento respecto de hace un año, incluso con los vuelos añadidos para la última semana de noviembre. AAA Texas indicó que solo se espera que vuelen 151 mil tejanos, menos del cuatro por ciento de todos los viajeros del estado.

Estados como California han creado restricciones en cuanto a la cantidad de gente que puede reunirse y la duración de las reuniones. Un número creciente de regiones en Estados Unidos requiere cuarentenas para los viajeros que llegan a esas zonas. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por su sigla en inglés) animan a los estadounidenses a limitar el número de personas que se reúnen y a comer en el exterior.

Las propias aerolíneas están promocionando estudios que muestran el bajo riesgo de contraer COVID-19 durante un vuelo debido a las tecnologías de filtrado de aire, pero las aerolíneas aún así se apresuran a deshacerse de los pasajeros que no respetan las reglas del tapabocas.

Southwest, que ha estado limitando las ventas para mantener los asientos de enmedio vacíos, comenzará a llenar los aviones hasta su capacidad el 1º de diciembre, justo después de la temporada de vacaciones. Esto sigue a una serie de estudios, muchos patrocinados por la industria de las aerolíneas, que mostraron que la propagación del COVID-19 dentro de los aviones era menor que en otros lugares públicos.

“Cuando uno analiza los datos que se han recolectado … no se puede ver ninguna diferencia medible en el riesgo con el asiento central disponible”, comentó el investigador de la Harvard University, Jack McCarthy, quien realizó uno de los estudios sobre la seguridad de los aviones durante la pandemia del COVID-19.

La TSA solo ha registrado hasta ahora un día desde el comienzo de la pandemia en que más de un millón de pasajeros pasaron por los puntos de control. Ese domingo 18 de octubre fue el final de la pausa de otoño en muchas partes del país, y DFW declaró que más de 142 mil pasajeros pasaron por el aeropuerto ese día.

Ese récord de pandemia probablemente se romperá de nuevo en los próximos días con el primer gran viaje de vacaciones desde el final del verano.

Mientras tanto, los pasajeros todavía tendrán que atravesar aeropuertos cada vez más concurridos en esta temporada de vacaciones en busca de alimentos, suministros y un lugar para descansar antes y entre los vuelos.

Alrededor de una cuarta parte de los restaurantes y comercios de los aeropuertos siguen cerrados y algunos han quebrado, mientras que los que quedan se están adaptando a servir más comidas para llevar y han cerrado sus bares.

Williams, quien ha dirigido la seguridad en Love Field para la TSA durante 18 años, dijo que la pandemia del COVID-19 ha añadido un nuevo conjunto de desafíos para la agencia de seguridad, que fue diseñada para detener las amenazas terroristas, no necesariamente las amenazas a la salud. Los agentes de la TSA ahora manejan menos pases de abordaje e identificaciones con foto. Los agentes de detección están usando tapabocas y caretas y cambiando de guantes entre cada cateo.

Ken Buchanan, vicepresidente ejecutivo de gestión de ingresos y experiencia del cliente del Aeropuerto Internacional DFW, declaró que el aeropuerto ha colocado carteles, instalado barreras de plexiglás y adoptado otras precauciones de seguridad, pero advirtió que todavía hay momentos en que la gente tiende a reunirse demasiado cerca.

“Hay más oportunidades de esparcirse con menos gente en el aeropuerto”, señaló Buchanan. “Obviamente, cuando llega la hora de embarcar, la gente se congrega y espera cerca de la puerta. Tratamos de animarles a que tomen su turno porque el avión no va a despegar sin ellos”.

El aeropuerto ha instalado dispensadores de jabón y toallas sin contacto en los baños junto con dispensadores de desinfectante de manos. Buchanan señala que el reparto de alimentos se ha vuelto cada vez más popular dentro del aeropuerto con mensajeros que llevarán los alimentos y las mercancías de venta al por menor como cables de carga hasta las puertas de abordaje.

“Fuimos afortunados de tenerlo (la entrega de restaurante hasta la puerta de abordaje) implementado y en marcha cuando el COVID llegó”, dijo Buchanan. “La gente realmente busca una experiencia sin contacto ahora”.

– Este texto fue traducido por Kreativa Inc.

Fuente: By Kyle Arnold, The Dallas Morning News