Dos millones de pruebas PCR en una semana: ese fue el balance de los 182 laboratorios alemanes unidos en la Asociación de Laboratorios Acreditados en Medicina (ALM e.V.). En la segunda semana de enero de 2022 se llevó a cabo el mayor número de pruebas PCR desde el estallido de la pandemia del coronavirus, lo que supone un aumento del 40 por ciento en comparación con la semana anterior. Más de 486.000 pruebas detectaron una infección. Esto significa que una de cada cuatro personas examinadas estaba infectada por el virus. Es probable que se establezcan nuevos récords en esta tercera semana del nuevo año y se teme un nuevo aumento de estas cifras en las próximas semanas, ya que, según la opinión unánime de los expertos, aún no se ha alcanzado la cresta de la ola del ómicron en Alemania. Pero, poco a poco, las pruebas se van agotando y las capacidades de los laboratorios llegan a su límite. ¿Podría haber pronto una escasez crítica?

“Depende de que todos los empleados permanezcan sanos, no se infecten o no tengan que entrar en cuarentena. No puedo predecir estos factores”, afirma Michael Müller, médico de laboratorio y presidente de la junta directiva de la Asociación de Laboratorios Acreditados en Medicina. Müller confía en la nueva estrategia nacional de pruebas, que prevé dar prioridad a las pruebas PCR y dar acceso preferente al personal sanitario.

Nueva estrategia para las pruebas PCR
Para el fin de semana, el ministro federal de Salud, Karl Lauterbach, quiere preparar un proyecto de resolución para establecer prioridades a la hora de hacer test. La medida se debatirá y se votará en la conferencia de los jefes de los estados federados a principios de la próxima semana. Hasta ahora, ha habido suficientes capacidades, pero Lauterbach ve problemas en el futuro debido al rápido aumento del número de infecciones. Por eso es importante reservar las pruebas para quienes trabajan con grupos de personas vulnerables. “Está claro que hay que tener en cuenta a los trabajadores de los hospitales, a los cuidadores, a las personas en régimen de integración y a los discapacitados. Y tenemos que tener especial cuidado de que, cuando estas personas vuelvan al trabajo tras el aislamiento, no sean contagiosas e infecten a personas vulnerables”, dijo Lauterbach en el canal de televisión ZDF.

Las pruebas de antígenos siguen siendo importantes
A los demás ciudadanos se les recomendaría no realizar la prueba PCR para no sobrepasar las limitadas capacidades de los laboratorios. Sin embargo, pueden seguir comprobando si se han contagiado con una prueba rápida de antígenos. El jefe de la AML, Müller, tampoco ve un mayor riesgo de infectarse o transmitir una infección para los grupos de población no prioritarios como resultado de la nueva normativa.

“Si todos cuidan su propio comportamiento, es decir, usan mascarillas, mantienen la distancia, reducen los contactos, se quedan en casa con síntomas, se aíslan e informan a sus contactos, entonces el riesgo de contraer o transmitir una infección es bajo”.

En la segunda semana de enero se realizaron un total de casi 47.000 pruebas en la capital alemana, la mayoría en los centros de pruebas oficiales. Allí, las pruebas de PCR son gratuitas si se ha recibido un aviso en la app del coronavirus de que se ha estado cerca de personas infectadas o si se desea salir de la cuarentena tras una infección. En cambio, con los proveedores comerciales, solo las pruebas rápidas son gratuitas. Para las pruebas de PCR hay que pagar, y los precios varían mucho en función de la finalidad para la que se necesite la prueba. Por ello, también en Berlín se están centrando ahora en priorizar las pruebas de PCR para aliviar la situación y no sobrecargar a los laboratorios.

Aliviar los laboratorios
Michael Müller, señala que en los laboratorios no solo se realizan test para detectar el coronavirus, sino también otras pruebas médicas importantes. “Es fundamental que se entienda que, además del diagnóstico de COVID, también se examinan en los laboratorios todas las demás enfermedades, la diabetes y otras, y para ello también se necesitan con urgencia los empleados”. Su recomendación es, por tanto, evitar nuevos contagios mediante la vacunación, los refuerzos y el cumplimiento de las normas de higiene. En última instancia, esto también supondría una reducción de la carga de trabajo de los laboratorios, las consultas médicas y los hospitales.

(gg/ms)

Autor: Bettina Marx