Primero la buena noticia: la vacuna contra el coronavirus desarrollada por BioNTech y Pfizer también debería proteger contra las mutaciones del virus que han surgido en el Reino Unido y Sudáfrica, según un nuevo estudio de la Universidad de Texas.

En 20 personas vacunadas en ensayos se demostró que sus anticuerpos combatieron con éxito el virus, al menos en laboratorio. Aunque solo se trate de pruebas in vitro, en condiciones de laboratorio, y aunque el grupo de ensayo no haya sido particularmente grande, la noticia es tranquilizadora.

Además, todavía no hay pruebas de que estas variantes del coronavirus causen desarrollos más severos de la enfermedad del COVID-19, ni que sean responsables de mayores tasas de mortalidad.

La rápida expansión se convierte en un reto
Sin embargo, también hay malas noticias: estas variantes del virus son tan contagiosas que, allí donde están proliferando, demasiadas personas se enferman a la vez. La variante británica, por ejemplo, se considera hasta un 70 por ciento más contagiosa que las anteriores variantes del coronavirus.

Esto puede llevar al colapso de los sistemas de salud en algunos países, que ya están operando al límite de su capacidad. En muchos lugares, simplemente hay una falta de camas de hospital, ventiladores, unidades de cuidados intensivos y personal.

Según el Prof. Dr. Richard Neher, jefe del grupo de investigación sobre la evolución de virus y bacterias de la Universidad de Basilea, el principal peligro que plantean estas mutaciones es una posible propagación más acelerada. “Si la variante se propaga realmente entre un 50 a un 60 por ciento más rápidamente, eso lleva a que habrá muchos más casos que deben ser atendidos por el sistema sanitario, algunos de los cuales, desafortunadamente, también mueren. Más allá de eso, por supuesto, existe la preocupación de que podría conducir a la reinfección y reducir la eficacia de la vacuna, pero creo que es una preocupación secundaria en este momento”, dijo Neher en una conferencia virtual organizada por el Science Media Center Germany (SMC).

Los datos sobre las mutaciones aún deben ser evaluados
Hasta ahora, el conocimiento sobre la nueva mutación proviene principalmente de las observaciones epidemiológicas de su rápida propagación. Apenas se dispone, por el momento, de datos biológicos sobre las variantes.

Las mutaciones no son nada inusual en los virus; en promedio, surgen dos nuevas variantes cada mes. Sin embargo, son motivo de especial preocupación las dos cepas del coronavirus SARS-CoV-2 que se están propagando rápidamente en Gran Bretaña y también en Dinamarca, y la variante que ya ha acumulado ocho mutaciones diferentes en su genoma y se está propagando principalmente en Sudáfrica.

La cepa sudafricana es preocupante porque, además de las ocho mutaciones ya conocidas, esta lleva otra mutación, llamada E484K. Y esta mutación E484K tiene una influencia negativa en cuanto a la neutralización del coronavirus: si cambia una parte de la proteína “spike” en la superficie del virus, que es importante para que el sistema inmunitario lo reconozca y combata, los anticuerpos serían menos eficaces en su tarea de reconocer y eliminar al coronavirus. La protección de la vacuna perdería así su eficacia.

¿Las vacunas contra el COVID-19 funcionarán con las nuevas variantes?
De momento, sí. Pero no solo en pruebas de laboratorio, sino en amplios estudios de base, se debe seguir investigando cómo las vacunas hacen frente a las mutaciones que se conocen hasta ahora. Si en el futuro el coronavirus mutase hasta tal punto que la respuesta inmune desencadenada por la vacunación ya no consiguiera neutralizarlo, entonces las vacunas tendrían que ser modificadas.

Según BioNTech-Pfizer, tal modificación no es tan difícil de llevar a cabo. El código genético del virus contenido en la vacuna se puede cambiar con relativa facilidad. Sin embargo, los ensayos y la aprobación, así como la producción y distribución de la vacuna adaptada, llevan tiempo, y ya muchos centros de vacunación esperan con impaciencia la vacuna actualmente válida.

(gg/cp)

Autor: Alexander Freund