Cuando uno observa la trayectoria de Cristiano Ronaldo, su interminable palmarés y su reto vital, cada vez más cercano, de llegar a los 1.000 goles en su carrera, entiende que se le apode ‘el astro portugués’. Pero cuando figura entre el tráfico aéreo una aeronave en la que lucen sus siglas y una sombra del icónico futbolista realizando el gesto característico de sus celebraciones tras anotar un tanto, se añade algo de realismo al mentado sobrenombre. Dicho avión multimillonario pertenece al delantero del Al Nassr y, desde hace unos días, está varado en el aeropuerto de Manchester.

No es un vehículo cualquiera. El Bombardier Global Express 6500 es una auténtica máquina vanguardista de la aviación valorada en 73 millones de euros que, como es evidente, no ha pasado desapercibida ante los que se encontraban en el aeródromo; todavía menos si encadena cinco días allí. El motivo, tal y como avanza The Sun y se han hecho eco numerosos medios británicos, es un grave problema de seguridad que ha obligado a retener el avión hasta que se consiga reparar.

El asunto en cuestión es una grieta en una de sus ventanas. Los ingenieros hallaron este desperfecto en el jet negro mate mientras lo revisaban de manera protocolaria. Al cerciorarse, pidieron de inmediato que el fabricante les enviase una pieza de repuesto; y hasta que no llegue, no despegará.

Un misterio y una coincidencia

Se desconoce el motivo por el que se encuentra el avión en el aeroparque mancuniano. De hecho, es altamente probable que ni siquiera viajase en él Cristiano Ronaldo porque la noche anterior a su llegada se encontraba disputando un partido con el Al Nassr. Los rotativos británicos apuntan a que, casi con toda seguridad, un cliente del portugués alquiló el avión, negocio que le reporta amplios beneficios.

En los días en los que este avión, uno de los más rápidos del mundo y capaz de realizar viajes intercontinentales sin escalas, ha permanecido allí, se ha cruzado con el aeroplano al que se subió la plantilla del Manchester City para poner rumbo a Madrid con el objetivo de disputar el partido de playoff de Champions League. Después del encuentro, hay quien dice que el equipo de Guardiola no llegó a bajarse del avión.

AS