Tesla confía en que los últimos parches que está preparando ayuden a solventar algunos problemas en sus últimos modelos de 2021 y 2022. Esta vez, el problema está en que los sistemas de infoentretenimiento de los coches se calientan demasiado y comienzan a funcionar mal por el calor.

La Administración Nacional de Seguridad y Tráfico en Carreteras de Estados Unidos envió una carta a Tesla este lunes exigiendo a la compañía que por seguridad retirase hasta 130.000 Model 3, S, X e Y de sus líneas de automóviles de 2021 y 2022. La administración declaró que la CPU del sistema de infoentretenimiento podía sobrecalentarse, haciendo que funcionase con lentitud o incluso provocando que se reiniciase, algo que impedía el correcto uso de funciones con la cámara trasera, la selección de marchas o el encendido de los warnings.

La compañía afirmó que desde enero ha recibido 59 informes de casos reales sobre este asunto, pero que no habían derivado en ningún accidente.

Tesla dijo que ya había empezado a implementar gratuitamente actualizaciones de software inalámbricas que ayudasen a mejorar la gestión de la temperatura de la CPU a partir del 3 de mayo.

En abril, la compañía tuvo que emitir actualizaciones a 63.000 coches entre Estados Unidos y China porque no mostraban los kilómetros por hora a los que iba el coche cuando cuando estaban en “Track Mode”.

Este año también tuvo que llamar a revisión a miles de coches en otras ocasiones, como cuando tuvo que lanzar una actualización para 54.000 coches que, según los informes, ignoraban las señales de stop. En febrero, la compañía tuvo que actualizar más de medio millón de vehículos Tesla para eliminar la función “boombox”, que permitía reproducir sonidos pregrabados por los altavoces del coche.

Otros 800.000 coches fueron llamados a revisión en febrero porque los coches no emitían ningún sonido para advertir al conductor de que los cinturones de seguridad no estaban abrochados. Los propietarios de un Testa pueden verificar si su automóvil está entre los afectados de alguna revisión aquí.

Como informó la CNN en marzo, las actualizaciones remotas de vehículos tienen sus ventajas, sobre todo porque la adopción de estas actualizaciones está cerca del 100% frente al 75% de los vehículos tradicionales. El problema, según los expertos de la industria automotriz, es cuando los conductores humanos son tratados como “conejillos de indias” con funciones como la famosa boombox de Musk, que llevan a los fabricantes de automóviles a pensar en su coche como si fuese un gigantesco videojuego que puede ir recibiendo parches con el paso del los días, en vez de plantearse que pueden derivar en accidentes automovilísticos serios.