WEST PALM BEACH, Florida, EE.UU. (AP) — El expresidente Donald Trump abordó el lunes su avión privado en Florida y partió hacia Nueva York para su fichaje y lectura de cargos, mientras la ciudad más grande del país intensificaba sus medidas de seguridad y advertía a potenciales agitadores que “este no es jardín para su enojo mal encauzado”.

Su viaje en automóvil desde su mansión Mar-a-Lago a su avión privado —un Boeing 757 rojo, azul y blanco con la palabra “TRUMP” pintada en letras doradas— fue transmitido en vivo por la televisión nacional y pasó al lado de grupos de partidarios agolpados al lado de la carretera que le gritaban vivas. Trump y sus simpatizantes consideran que el caso en su contra, basado en pagos a personas para asegurar su silencio durante la campaña electoral de 2016, tiene fines políticos.

La situación era muy distinta en Nueva York, la ciudad donde Trump se hizo famoso en el sector de bienes raíces y programas de entretenimiento, pero donde se volvió sumamente impopular a partir de su incursión en la política.