En un esfuerzo por hacer de la seguridad de las personas una prioridad en medio del conflicto militar entre Ucrania y Rusia, Twitter suspendió temporalmente la visualización de anuncios en su plataforma en ambos países
La compañía informó que los anuncios podrían distraer a los usuarios de la información crítica.
“Pausamos temporalmente los anuncios en Ucrania y Rusia para garantizar que la información crítica de seguridad pública sea elevada y los anuncios no la resten valor”, declaró el viernes Twitter en un comunicado.
Además, la red social reveló que también había “pausado algunas recomendaciones de Tweets de personas que no sigues en Home Timeline para reducir la propagación de contenido abusivo”.
Asimismo, Twitter anunció que estaba “revisando proactivamente los tuits para detectar la manipulación de la plataforma (u otro comportamiento no auténtico)” y estaba tomando medidas enérgicas contra los “medios sintéticos y manipulados” que brindan una “representación falsa o engañosa” del conflicto en Ucrania.
La compañía también indicó que igualaría las donaciones de los empleados a los refugiados ucranianos.
También informó que se encontraba “monitoreando activamente cuentas vulnerables de alto perfil, incluidos periodistas, activistas y funcionarios y agencias gubernamentales para mitigar cualquier intento de adquisición o manipulación dirigida”.
Twitter hizo esos anuncios en tres idiomas: inglés, ruso y ucraniano.
El cambio en la política de Twitter se produce cuando la operación militar rusa en Ucrania entra en su tercer día.
Twitter no es la única red social que ha anunciado cambios en medio del conflicto entre Ucrania y Rusia, pues Facebook dio a conocer el viernes que prohibiría a los medios de comunicación estatales rusos publicitar o monetizar su contenido su plataforma en respuesta a los ataques contra Ucrania.
Por su parte, el regulador de medios de Rusia, Roskomnadzor, anunció esta semana que el acceso a Facebook estaría restringido en el país después de que Moscú la acusara y a su empresa matriz Meta de violar los “derechos humanos fundamentales” y la ley rusa con su censura a las organizaciones de medios rusas.