El presidente Jo Biden aseguró el lunes que los estadounidenses pueden “tener confianza” en que la banca nacional es segura después de una importante quiebra reciente y los temores globales de un efecto dominó.

El mandatario también instó al Congreso y a los reguladores a “fortalecer las reglas” sobre los bancos y aseguró que ninguna de las pérdidas por quiebras bancarias será una carga para los contribuyentes, sino que los fondos provendrán de las comisiones bancarias.

Los reguladores cerraron el Silicon Valley Bank el viernes después de que los depositantes se apresuraron a retirar sus fondos de una vez. Es la segunda quiebra bancaria más grande en la historia de Estados Unidos, después de la de Washington Mutual en 2008.