El Estado chileno ha vulnerado de forma grave y sistemática los derechos humanos de niños, niñas y adolescentes desde el estallido social iniciado en octubre de 2019, advirtió el “Informe Anual 2020 de la Defensoría de la Niñez de Chile”.

Según el documento, el Gobierno andino ha ocasionado “lesiones físicas por golpes, balines, gas pimienta o lacrimógeno, además de traumas oculares” y se han registrado 818 denuncias por ese tipo de hechos desde que comenzó el estallido social del año pasado.

La Defensoría de la Niñez del país sudamericano señala las lesiones que las fuerzas del orden han infligido a manifestantes desde 2019