El Kremlin advirtió que dispararán los precios de los alimentos, de la misma forma que ocurre con el petróleo .El gobierno de Putin además amenaza con hacerse con los activos de las empresas que han detenido operaciones en el país. Los rusos ya han prohibido las exportaciones de más de 200 productos como respuesta a las sanciones de Europa y Estados Unidos. En la lista están equipos de telecomunicaciones, maquinas automotrices, agrícolas, y también insumos eléctricos.