Cerca de 1,6 millones de solicitudes de asilo están pendientes en los tribunales de inmigración de Estados Unidos y en el Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS, por sus siglas en inglés), el mayor número jamás registrado, según el análisis de datos federales que realizó el Transactional Records Access Clearinghouse de la Universidad de Syracuse.
Los tribunales de inmigración de Estados Unidos enfrentan un aumento de más de siete veces en los casos de asilo desde el año fiscal 2012, cuando se registraron 100.000 casos pendientes, y el final del año fiscal 2022, cuando el retraso creció a más de 750.000, según el centro de intercambio de información.
“Desde entonces, solo en los dos primeros meses del [año fiscal] 2023 (octubre-noviembre de 2022), el retraso en el asilo aumentó en más de 30.000 nuevos casos y ahora asciende a 787.882”, declaró el centro.
Los solicitantes de asilo provienen de 219 países distintos y hablan 418 lenguas diferentes, según el grupo de Syracuse. Aproximadamente tres de cada 10 son menores de 18 años y los principales países de origen son Guatemala, Venezuela, Cuba y Brasil, según el grupo. Florida y Massachusetts se encuentran entre los estados con mayor incremento de solicitudes de asilo.
Años de espera para las audiencias de asilo
El tiempo promedio de espera para una audiencia de asilo es de unos 4,3 años, pero en Omaha, Nebraska —el tribunal con el mayor retraso—, el tiempo de espera es de 5,9 años de media, según el grupo.
Un número cada vez mayor de solicitantes de asilo se controla electrónicamente a través del programa Alternativa a la Detención del Departamento de Seguridad Nacional. Mientras tanto, una pequeña parte —alrededor de 2.000— está detenida bajo la autoridad de ICE, según el centro de intercambio de información.
El análisis se produce en medio de una reciente oleada de inmigrantes —muchos procedentes de Venezuela y Haití— en la frontera sur de Estados Unidos.
A pesar de las bajas temperaturas, los agentes fronterizos de la zona de El Paso, Texas, siguen encontrando entre 1.500 y 1.600 migrantes cada día, según declaró a CNN una fuente de las fuerzas de seguridad federales con conocimiento de las operaciones sobre el terreno.
Se trata de un descenso en comparación con las cifras de hace unas semanas, cuando se encontraban 2.500 inmigrantes al día. La semana pasada, los encuentros diarios se redujeron a unos 1.500, según un comunicado del Departamento de Seguridad Nacional.
La ciudad declaró el estado de emergencia a principios de mes por los miles de inmigrantes que viven en condiciones inseguras.
Búsqueda de refugio en medio del clima invernal
Muchos inmigrantes indocumentados —aquellos que no tienen la documentación adecuada que demuestre que han sido procesados por la Patrulla Fronteriza estadounidense— han estado en las calles buscando refugio durante la tormenta invernal. La misma fuente policial también advirtió que el contrabando de personas ha continuado en la zona.
Peter Jaquez, jefe de la patrulla fronteriza en El Paso, tuiteó la semana pasada que en 48 horas los agentes habían frustrado 12 planes de contrabando y detenido a 15 traficantes de personas y 57 migrantes.
En la zona de El Paso se realizan esfuerzos para transportar a los migrantes a otros sectores para su procesamiento, según la fuente policial. La semana pasada, unos 6.000 inmigrantes fueron trasladados fuera de la zona de El Paso para su procesamiento. A otros 3.400 se les expulsó en vuelos con ese fin, según informó anteriormente CNN.
