Michelle Dallaire, de 50 años, una abogada de Idlewild, Michigan, pasará su primera Navidad lejos de su padre, que vive en el norte de Virginia. Siempre se reúne con la familia para las fiestas pero este año la pandemia trastocó sus planes. Decidió que no valía la pena arriesgarse.

“Es triste, pero es mejor que no volver a verlo jamás”, aseguró Dallaire, quien tiene problemas de salud que la hacen particularmente vulnerable al virus.

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A un día de la Nochebuena, Estados Unidos no ha impuesto restricciones de viaje a nivel nacional, dejando esa decisión a los Gobiernos estatales, pero las autoridades aconsejan a la gente que se quede en casa.

Sobre todo cuando el país registró el martes un nuevo récord de muertes por COVID-19 en un solo día: 3,350, según un recuento de nuestra cadena hermana NBC News.

Este número supera el último récord reportado el 16 de diciembre. En la última semana, 18,980 personas han muerto por COVID-19, a un ritmo más rápido que en cualquier otro momento de la pandemia, según este mismo recuento.

El país registró también más de 205,000 casos de coronavirus este martes. El último récord fue el pasado viernes con 248,259.

En total, EE.UU. ha superado los 18.2 millones de contagios y más de 323,000 han muerto, lo que convierte este año en el más mortífero en la historia de Estados Unidos debido a la pandemia.

Asimismo, la Administración Trump anunció este miércoles la compra de 100 millones de dosis adicionales de la vacuna de Pfizer, asegurándose de que todos los estadounidenses que lo deseen puedan ser vacunados para junio. Esto se suma a los 100 millones de dosis ya compradas por el Gobierno.

Aunque la llegada de la vacuna no disipa los temores con la llegada de la nueva cepa del coronavirus detectada en el Reino Unido y en Sudáfrica, más contagiosa, el mayor experto en enfermedades infecciosas, Anthony Fauci, estima que ya llegó al país.

Las prohibiciones de viaje podrían ralentizar la nueva variante. A largo plazo, sin embargo, muchos científicos piensan que esta cepa, o una como ella, simplemente superará a las otras en circulación y se convertirá en la versión dominante del virus en todo el mundo.

“No tengo ninguna duda de que va a llegar”, aseguró a nuestra cadena hermana NBC News Hajo Zeeb, profesor del Instituto Leibniz de Investigación Preventiva y Epidemiología de Alemania.

“De lo que hemos aprendido sobre el virus, va a ser difícil de contener”, aseguró. “No creo que sea posible evitar que se extienda internacionalmente”, agregó.

Aunque cerca de medio centenar de países han prohibido los viajes a y desde el Reino Unidos, Estados Unidos todavía no lo ha hecho.

En medio de este panorama, el presidente, Donald Trump, amenazó con vetar el paquete de ayuda por la pandemia aprobado por el Congreso tras ocho meses de negociaciones.

Una rara temporada navideña en todo el mundo

Aunque las restricciones impuestas por Gobiernos locales y nacionales varían en todo el mundo, que superó las 1.7 millones de muertes por la enfermedad, estas serán unas navidades de aislamiento en la mayoría de los países católicos.

Muchas familias se enfrentan a una decisión difícil: ver a sus seres queridos a pesar del riesgo que eso supone para los mayores, o pasar unas fechas tan especiales aislados.

Mientras que en México, las autoridades han desalentado las reuniones familiares en la Ciudad de México, a los peruanos no se les permitirá conducir en Navidad y Año Nuevo para desalentar las visitas, incluso con familiares y amigos cercanos

En Brasil, que tiene el segundo mayor número de muertes por coronavirus del mundo después de Estados Unidos, Francisco Paulo tomó una decisión similar al saltarse una visita a su madre que es mayor en São José do Belmonte, en el estado de Pernambuco. El portero de 53 años trabajará durante las vacaciones en un edificio de São Paulo.

“Espero conducir hasta allá (Pernambuco) en mayo, y cruzar los dedos para que esté vacunada para entonces”, aseguró Paulo.

“No es una feliz Navidad, pero al menos estoy sano y también lo están todas las personas que quiero”, agregó.

En Europa, los residentes de ciudades como Londres también tienen prohibido ver a gente fuera de sus casas.

Con información de AP y NBC News.